Ok

By continuing your visit to this site, you accept the use of cookies. These ensure the smooth running of our services. Learn more.

On aime

04/04/07 | On aime

Hay una parte de mí que no me obedece

que me traiciona en cuanto le doy la espalda

y me pone una trampa apenas me descuido.

Me hace cruzar los semáforos en rojo,

estacionar donde no debo,

ir a contramano,

robar las manzanas del vecino,

tirar piedras a los faroles de las plazas,

- casi nunca acierto -,

fumar hasta mancharme la vida de nicotina,

hacer promesas que no cumplo,

llegar tarde a la dicha,

a la suerte, al trabajo, al amor.

Actúa por si sola y se complace a si misma.

Se ríe de la ley,

no respeta las normas

y boicotea mi vida diariamente.

No puedo controlarla, no sé que hacer con ella.

Aunque habite en mí nunca la he visto,

es una extraña inquilina que no puedo desalojar.

Se asoma cuando me equivoco,

se manifiesta en cada olvido,

aparece cuando no pienso,

cuando duermo, cuando sueño.

Es esa parte de mí

que me hace tropezar

dos veces con la misma piedra,

jugar con el fuego,

caminar al borde del precipicio,

que te desea a mi pesar

y no me deja decirte adiós

porque no puede vivir sin ti.

Es esa parte de mí

que pasa por tu casa, porque en el fondo sabe,

que hay una parte de ti

que siempre le abrirá la puerta.


GIAN FRANCO PAGLIARO

20:19 Anotado en pintura | Permalink | Comentarios (2)

Comentarios

Eres incorregiblemente romántica, pero de aquellas que hablábamos el otro día: las de la época de Gustavo Adolfo Becquer y compañía. L@s viej@s romantic@s nunca mueren, ya sabes. Por cierto, no es necesaria la muerte para estar, de una forma irredenta, eternamente enamorad@.

Anotado por: Manel | 05/04/07

Pilar, hermosa pintura, bello el poema de Pagliaro,
Un gusto pasar por aqui saltando del blog de Manel.
Te dejo unos versos que me ha inspirado tu obra y te pido permiso para poner tu obra junto a mis versos en mi blog, si es que los crees a la altura de tu obra. Sería un honor para mi
Un beso desde Argentina

En tus brazos


Me levantas en tus brazos,
mi cabeza reclino en tu pecho
y me siento segura
enredando mi brazo a tu cuello

Mi cuerpo desnudo
se aprisiona a tu cuerpo,
y aspiro tu aroma
con la misma delicia
con que huelo
los aromas del huerto.

Y el sabor de tu boca
¡Ay el sabor de tu húmeda boca!
se asemeja al sabor
de los frutos maduros de enero

Me alzas con ternura,
con dulzura me besas el pelo
y susurras mi nombre,
mientras yo te murmuro
-Te quiero.

Y cuando depositas mi cuerpo
en las sábanas blancas del lecho,
como un niño asustado
te duermes tranquilo en mi pecho.

anngiels

Anotado por: anngiels | 01/10/07

Los comentarios son cerrados